El turismo, como principal motor de la economía del municipio, dejó en un segundo plano el papel del sector industrial agroalimentario de las áreas rurales. Hoy, las principales industrias del municipio están ligadas al sector turístico como es el caso del subsector de la construcción (cementos, derivados, transformados metálicos) y el comercio.

Históricamente, la industria en Adeje se ha especializado en actividades como la agricultura de exportación, la captación de aguas y la extracción de áridos. En los últimos años se están impulsando también las conocidas como agroindustrias, pequeñas industrias dedicadas a la transformación de productos agrícolas para su posterior venta. Se sitúan en ámbitos rurales, estimuladas por el menor precio del suelo, por la cercanía a la materia prima, reduciendo así los costes y el tiempo de transporte.

Por tanto, las industrias asociadas al medio rural son en su mayoría las agroalimentarias y una parte importante de sus productos se producen e intentan mantener con técnicas de elaboración transmitidas de generación en generación.

12.4. El Agromercado de Adeje acoge  productos locales, frescos y de alta calidad, además, también hay hueco aquí para las  producciones ecológicas y para la repostería tradicional, los quesos y los vinos. (AAD)

Destacan el molino de Gofio Adeje, la Cooperativa Agrícola San Sebastián, el Agromercado de Adeje, una instalaci�n municipal donde se oferta una variada selecci�n de productos hortofrut�colas locales de temporada de la comarca sur de la isla, y las pequeñas empresas de carácter familiar como la empresa artesanal Montesdeoca dedicada a la elaboración del queso de cabra.

También nombrar los productos derivados de la leche, las carnes y sus derivados, y el vino. Se suman el aprovechamiento de los productos agrícolas (frutales y almendras), para la elaboración de postres, mermeladas, etc.

Las industrias rurales tienen una importancia trascendental, no sólo económica, sino también cultural y paisajística. Las explotaciones industriales revitalizan el tejido social, permitiendo complementar las rentas y contribuir a la fijación de la población rural. Al mismo tiempo, contribuye al mantenimiento de las actividades agroganaderas y sus paisajes, convirtiéndolos en un atractivo más de la gran oferta turística de la que presume el municipio.