Patrimonio Natural
Lo primero que llama la atención al llegar a La Aldea es el particular paisaje. Un gran valle, protegido por laderas escarpadas y arañadas por multitud de barranqueras que llegan al cauce principal en paredes de gran desnivel.
Las zonas de costa de la comarca poseen una gran riqueza de paisajes. Los grandes acantilados sólo permiten la aparición de pequeñas playas o calas, a las que sólo se puede acceder a pie, 4x4 ó, incluso, en barco. Algunas de estas playas son:
La playa de La Aldea: Es la de mayor tamaño y la mejor dotada de servicios. Güi-Güí Grande y Güi-Güí chico y Lioguicha, tres pequeñas calas nudistas, a las que se accede a pie. Descojonado, Tasartico, Aneas, también calas pequeñas sin dotaciones de servicios. Tasarte, que dispone de un camping y restaurante. Los Secos, a la que sólo es posible acceder en barco.
El Charco de La Aldea. Es un lugar natural, pero de gran interés etnográfico e histórico. Es uno de los ecosistemas costeros mejor cuidados de Canarias. Esta charca se formaba en la desembocadura del barranco de La Aldea y recibía el nombre de La Marciega. En este charco se celebra el festejo más importante del municipio, la Fiesta del Charco, que tiene lugar durante las fiestas en honor a San Nicolás de Tolentino cada 11 de septiembre. En ella se revive la tradición pesquera de los antiguos pobladores del municipio, que consistía en echar savia de cardo en el agua para pescar (‘embarbascar a los peces’).
Miradores:
Mirador del balcón: Situado en la carretera que une La Aldea y Agaete. Desde allí se pueden observar unas impresionantes vistas de los Acantilados de la Punta de La Aldea. Degollada de La Aldea o de Tasarte: Es una parada obligada desde Mogán a La Aldea. Un mirador natural con vistas extensas hacia los barrancos de La Aldea y Tasarte. Desde otros muchos puntos de la comarca se tienen vistas panorámicas, como pueden ser los dos caminos a Güi-Güí, Inagua, el Barranco de Pino Gordo, etc. Para esto, la red de senderos con que cuenta el municipio es muy interesante.
Patrimonio Histórico y Cultural
La Aldea fue uno de los principales núcleos de población en la etapa prehistórica, por lo que cuenta con un rico patrimonio etnográfico. Ejemplo de ello es el Complejo Arqueológico de Los Caserones, en el que se ha encontrado gran variedad de vasijas y otros restos en barro y piedra. Se puede visitar el Túmulo Funerario del Lomo de Caserones, en la playa de La Aldea.
También encontramos elementos de la cultura canaria tradicional y de las actividades que se realizaban antaño:
El Museo Vivo. Nos muestra escenificaciones en vivo de las costumbres y tradiciones canarias como, por ejemplo, la trilla con animales, el ordeño de las cabras, la elaboración artesanal de quesos, etc. Los hornos de brea, cal y teja. Distribuidos por gran parte de la comarca como, por ejemplo, en la Montaña de Los Hornos, en Inagua. Los hornos de brea mantienen su estructura a pesar de no haber sido restaurados. Los Hornos Harineros, como el de Viento del Cruce, en la carretera que conduce hasta la playa o el de Agua de La Ladera, del que hay un proyecto para ponerlo en funcionamiento.
El Parque temático Cactualdea, situado cerca de Tocodomán, presenta una gran colección de cactus traídos de diferentes lugares del mundo.
En cuanto al patrimonio arquitectónico, debido a que la economía de La Aldea nunca tuvo un florecimiento notable, las obras arquitectónicas con que cuenta son de carácter popular.
El casco antiguo de La Aldea, donde se puede ver, por ejemplo, La Casa del Balcón, Las Casas Blancas, etc. La Ermita de San Nicolás, una de las más antiguas de Canarias. La Iglesia, construida en 1960 por orden del párroco de la época. Es de claro estilo neorrenacentista, aunque con algunas pinceladas góticas (rosetón y vidrieras). Se celebran conciertos de música clásica y canto.
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| Casco antiguo de La Aldea. (MC) |
La arquitectura hidráulica cuenta con aspectos de interés, como pueden ser las cantoneras, como la del Lomo del Cruce, los lavaderos, como los de Artejevez, las acequias y minas, los pozos, como el de Valle hermoso en Artejevez o el de Pancracia, etc.
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