Tacoronte

Es la auténtica referencia de la Comarca, tanto que en la actualidad se puede considerar ya como una pequeña ciudad. Posee bellezas arquitectónicas que merecen una visita, como la Iglesia de Santa Catalina o la Iglesia del Cristo de Los Dolores, que ofrece una fachada de cantería del siglo XVII y un interesante retablo barroco con influencias iberoamericanas.

- Bosque y Centro de Visitantes de Agua García. Este bosque es un reducto donde queda una pequeña representación del antiguo bosque de laurisilva que antes de los años 40 del siglo XX se extendía por toda la Comarca, y que fue talada y sustituida por plantaciones de pinos y eucaliptos. En el Centro de Visitantes, situado junto a la Casa Forestal de Agua García, se resumen las principales características y especies más emblemáticas que habitan este bosque; entre ellos, los ‘viñátigos centenarios’, con una edad similar a la del Drago de Icod.

- Mesa del Mar y El Pris. Se trata de dos núcleos costeros que se sitúan al pie de los potentes acantilados. En el primero se sitúa una urbanización turística, y ofrece una playa de aguas tranquilas en comparación con las condiciones que suele tener el mar en esta zona de la Isla. Se trata de una playa de carácter familiar muy visitada por los habitantes de la Comarca. El segundo, El Pris, es un pueblo de pescadores, con un cierto poder de atracción sobre el municipio.

- Parque Recreativo La Libertad. Está provisto de fogones, mesas, agua y aparcamientos. Ideal para disfrutar de un día en la naturaleza.

- La Fuentecilla. Es una zona del litoral del municipio que se encuentra en buen estado de conservación. Hay vegetación halófila con especies que ya son difíciles de encontrar en otras localidades del norte de la Isla.

- Centro de Conservación de la Biodiversidad Agrícola de Tenerife. Se trata de un centro impulsado por el Cabildo, cuyo objetivo es la recuperación y conservación de las variedades agrícolas tradicionales que se cultivan en Tenerife.

El Sauzal

Este pueblo, que se ha convertido en los últimos años en una zona residencial de referencia en la Isla, destaca por el atractivo de su casco urbano, agrupado alrededor de la Iglesia de San Pedro, que data de principios del siglo XVI. Cabe mencionar también el Parque de Los Lavaderos, y las áreas recreativas en la zona alta del municipio como Las Calderetas y Fuente Fría.

- Tubos volcánicos de La Labrada y Las Mechas. Están situados en el bosque de El Sauzal a unos 1.020 m de altura. Tienen un gran interés científico, debido a la existencia de especies cavernícolas troglobias adaptadas a vivir en la oscuridad, endémicas y algunas exclusivas de estas cuevas.

- Mirador de la Garañona. Se encuentra al final del propio casco urbano del municipio. Desde él se puede ver una panorámica de los Acantilados de la Costa de Acentejo. En la base del acantilado se encuentra una extensa playa de arena negra de difícil acceso llamada también La Garañona.

- Finca La Baranda – Museo del Vino – Casa de la Miel. Es una antigua hacienda canaria del siglo XVII que hoy alberga el Museo Insular del Vino. Cuenta con otros servicios como restaurante, tasca (desde cuya terraza puede divisarse una espectacular vista del Teide), sala de exposiciones, vinoteca, tienda y una sala de audiovisuales. Junto a la casa antigua se han construido las modernas instalaciones de la Casa de la Miel, que envasa la producción de los apicultores de la zona. Cuenta, además, con un Centro de Visitantes con exposiciones sobre el mundo apícola. Todo el conjunto forma parte de la Red de Calidad de Tenerife Rural.

- Bodegas Monje. Esta bodega toma el nombre de la saga familiar que la regenta desde 1756. Ofrece a sus visitantes un interesante recorrido por la propia bodega y sus viñedos llamada Jardín del Vino, con una espectacular panorámica del mar, las montañas y las tierras de cultivo. Toda su producción está amparada por la denominación de origen de la Comarca de Tacoronte-Acentejo. Está integrada en la Red de Calidad de Tenerife Rural.

- Bodegas Tagoror. Nació a principios de los años 90. Sus viñedos ocupan más de 60 hectáreas de superficie donde se producen las marcas Tagoror y El Engazo. Sus complejas instalaciones albergan un moderno museo, con atractivos contenidos divulgativos acerca de la historia de la finca y su actividad vitivinícola. Actualmente está en proceso de certificación para formar parte de los centros visitables de la Red de Calidad de Tenerife Rural.

La Matanza de Acentejo

Además de por su carácter histórico, debido a la derrota de los conquistadores a mano de los guanches, es famoso por sus vinos, y ermitas como la de San Antonio Abad, levantada en recuerdo de la batalla de los guanches, o la de El Salvador del Mundo, que fue construida en 1615, siendo pasto de las llamas en 1936 y reconstruida años más tarde.

- Montaña de San Antonio. Se trata de una bella zona de medianías, muy fecunda para el trabajo agrícola, sobre todo, de la vid.

Foto: Montaña de San Antonio. (DM)

La Victoria de Acentejo

En contraposición al nombre de su municipio vecino, se debe la victoria de las tropas castellanas sobre los aborígenes isleños. Cuenta con un relevante conjunto histórico, especialmente la Iglesia de Nuestra Señora de La Encarnación. Otro de los símbolos emblemáticos del municipio es el Pino Centenario.

- Pino Centenario. Se alza junto a la Iglesia de Nuestra Señora de La Encarnación, como testigo privilegiado de la historia. Fue a sus pies donde se celebró la primera misa tras la conquista de Tenerife, colgando de sus ramas las campanas de la antigua ermita.

- Mirador de la Costa de Acentejo. Desde este mirador se puede admirar el Paisaje Protegido de la Costa de Acentejo.

- Parque Recreativo Hoya del Abade. A una cota de 1.100 metros de altitud, cuenta con instalaciones para comer y parque infantil.

- Parque urbano El Pinar. Próximo al casco histórico del municipio, se encuentra un gran conjunto de plantas autóctonas con palmerales y brezos. Es recomendable pasear por los senderos de este parque y disfrutar de la vegetación.

Santa Úrsula

Pueblo que se ha convertido en dormitorio de la ciudad turística del Puerto de la Cruz, marca del inicio del Valle de La Orotava. Abundan los caseríos y los locales populares de comida y bebida. Hay que señalar también la potenciación económica que le dan las industrias instaladas en esta zona. Los núcleos o barrios principales son: La Corujera, Farrobillo y Cuesta de la Villa.

Foto: Barranco de Los Sauces. (DM)

- Barranco de Los Sauces. Lugar de sobrecogedora belleza. Posee unos lavaderos tradicionales en la zona alta de Santa Úrsula. Desde el Morro del Soldado, en los altos del municipio, se obtiene una excelente panorámica de la zona.