El poblamiento en el Valle de La Orotava es más disperso en las zonas de medianías, mientras que en las zonas bajas tiende a la concentración. Destacan entre los demás núcleos, los de La Orotava y la ciudad costera de Puerto de la Cruz. Dos son las características fundamentales de la distribución espacial de la población: por un lado, el continuo trasvase de ciudadanos desde el interior a las zonas litorales, que es consecuencia del fuerte incremento experimentado por el Puerto de la Cruz, especialmente a partir de la década de los sesenta; y, en segundo lugar, se detecta en los últimos años una cierta tendencia a la concentración, lo que está llevando a una pérdida del carácter rural de la población en relación directa con el retroceso de las actividades agrarias del Valle de La Orotava.
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Vista del Valle de La Orotava, con el casco de La Orotava (izq.), Los Realejos (centro) y Puerto de la Cruz (drcha.). (DM) |
El núcleo más poblado y que además es considerado como capital de la Comarca es el de La Orotava (17.834 habitantes), seguido por Puerto de La Cruz (12.734 habitantes). Mención aparte merece Los Realejos, cuya cabecera municipal se divide en dos barrios, el Realejo Alto y el Realejo Bajo , siendo el primero el de mayor volumen poblacional del municipio (6.715 habitantes).
A partir de la segunda mitad del siglo XX y en relación directa con el boom turístico que vivió el Puerto de La Cruz, muchos barrios que se situaban por debajo de la franja altitudinal de los 300 metros vieron incrementada su población. Es el caso de núcleos como La Vera, El Toscal, Longuera o La Luz.
Los núcleos tradicionales de medianías han mantenido un ritmo constante de crecimiento de la población, alterado sólo en algunos casos por la construcción en los últimos años de urbanizaciones residenciales. En este grupo cabe destacar la importancia que tienen núcleos como La Cruz Santa, Palo Blanco, San Antonio, La Florida y La Perdoma.
En las zonas de las medianías altas, por encima de los 600 metros de altitud, los barrios apenas han sufrido cambios con respecto al crecimiento poblacional. Este hecho es consecuencia de que la población originaria de la zona prefiere mantener sus campos de cultivos y dedicarse a ellos, por lo que la promoción de grandes urbanizaciones no tiene cabida en este espacio. En estas medianías altas destacan barrios como los de Aguamansa, Benijos o Icod El Alto.
Evolución de la Comarca en relación al total de la Isla desde 1950
Año |
Comarca de La Orotava |
Total de Tenerife |
Porcentaje |
1950 |
32.963* |
321.949* |
10,24% |
1960 |
56.489 |
394.466 |
14,32% |
1970 |
71.481 |
473.971 |
15,08% |
1981 |
79.733 |
557.191 |
14,31% |
1990 |
94.934 |
663.306 |
14,31% |
2000 |
97.483 |
709.365 |
13,74% |
2006 |
107.975 |
852.945 |
12,66% |
La población de la Comarca de La Orotava tiene un peso específico bastante importante a nivel insular, destacando un estancamiento, e incluso ligeros ascensos, desde finales de los años sesenta hasta la década de los noventa, circunstancia que viene a coincidir con los años de esplendor del turismo en el Puerto de La Cruz. Este peso demográfico sufre un ligero descenso en la actualidad, representando menos del 13% de la población de la Isla, consecuencia otra vez del desarrollo de la ciudad portuense, pero en esta ocasión debido a su estancamiento turístico.
El crecimiento demográfico de la Comarca sigue las mismas pautas que el de la Isla, doblando su población con respecto a hace cincuenta años. El mayor número se concentra en las edades adultas, hasta los 65 años.
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