Ubicación: 28° 25' N 16° 32' W Superficie: 8,73 km² Localización de la Cap.: 5 metros de altitud Población: 32.571 hab.(ISTAC 2010) Densidad de Población: 3.730,93hab. Km² Gentilicio: Portuense. Ranillero/a Alcalde: Marcos E. Brito Gutiérrez Administración: Actividades económicas principales: Turismo y sector servicios CP: 38400 Web(varias):http://www.puertodelacruz.es Núcleos de Población: La Vera, Punta Brava, Las Dehesas, Las Arenas, El Durazno

Pese a su escaso tamaño (8,73 km² en una abanico de coladas volcánicas) el Puerto de la Cruz se erige como uno de los pueblos más famosos en la historia de Tenerife y de toda Canarias. Antiguo puerto de La Orotava, en 1808 paso a ser municipio autónomo. La importancia que antaño tuvo su muelle, fue crucial para el desarrollo de la ciudad portuense. Hoy, el Puerto de la Cruz, ha pasado de ser un pueblo de pescadores y comerciantes a tener todo un ambiente cosmopolita a causa de la actividad turística.

Enclave pionero del desarrollo del turismo del Archipiélago gracias a la presencia de los ingleses desde el siglo XIX en el Valle de La Orotava, y a la relación comercial que se tenía con Inglaterra a través del muelle de la ciudad. A partir de la década de los 70 del siglo XX, comienza el verdadero boom turístico del Puerto de la Cruz, lo que supuso una auténtica transformación de la fisonomía urbana de la ciudad.

La actividad turística se ha visto mermada con el paso de los años en detrimento de la zona sur de la Isla. Pese a todo, bajo las capas de este transformado paisaje aún residen señas que recuerdan el pasado agrícola y pesquero que dio de vivir a las familias durante largos períodos de tiempo, hasta que fueron desapareciendo las plataneras y las casas unifamiliares para dar paso una fisonomía marcada por  el progreso turístico.

1.1. El Puerto de la Cruz se ha convertido en una ciudad cosmopolita en donde se entremezclan los elementos de antaño con la actividad turística. (DM)

El Puerto de la Cruz conserva un importante patrimonio arquitectónico e histórico. Es de reseñar el Parque del Hotel Taoro, la Plaza del Charco, la Avenida Colón y el paseo San Telmo, incluyendo su plazoleta y ermita, así como la Real Casa de Aduana, construida en el siglo XVIII y situada en el puerto de pescadores. También destaca el Castillo de San Felipe, del siglo XVII. En su fachada sobresale un bajorrelieve con la imagen de San Felipe y el escudo de Felipe IV de España.

Si bien es verdad que, a causa, de la especulación turística, se ha destrozado el paisaje urbano, también se han conseguido verdaderas maravillas como es la zona marítima de la Avenida de Colón, un alarde de originalidad creadora, donde destaca el Lago Martiánez, obra del artista lanzaroteño César Manrique, junto a toda una zona de piscinas, solariums, jardines y paseos adornados de rocas y de elementos arquitectónicos del tipismo canario.

Más ecológica aún, diseñada también por César Manrique, es la extraordinaria Playa Jardín, al otro extremo de la ciudad, junto al barrio de Punta Brava, donde se encuentra también el espectacular y divertido Loro Parque.

1.2. La remodelación de Playa Jardín, compuesta por las Playas del Charcón, del Castillo y la de Punta Brava, fue obra del artista lanzaroteño César Manrique. (APTC)

Otro lugar de interés es el Jardín Botánico, cuyo nombre oficial es Jardín de Aclimatación de La Orotava. Este jardín, fundado en 1788, por Don Alonso de Nava y Grimón, Marqués de Villanueva del Prado, bajo el reinado de Carlos III, ofrece una amplia muestra de flora autóctona canaria y del mundo.

En paisaje de la ciudad destaca la Iglesia de Nuestra Señora de la Peña de Francia y el Exconvento de San Juan Bautista, como los elementos artísticos religiosos más importantes del municipio.  El primero, data de principios del siglo XVII. Las pinturas más notables son las de Luis de la Cruz, y decoran el retablo de la capilla del Evangelio. Sobresalen además, las tallas de la Virgen del Rosario (siglo XVII), el Señor del Gran Poder, de procedencia sevillana (siglo XVII), la Virgen de los Dolores, que figura entre las mejores de España (siglo XVIII), y un San Pedro Arrepentido de Estévez. Ofrece también interés, una custodia de principios del siglo XVII procedente de Cuba. El segundo, el Exconvento de San Juan Bautista, ocupado por los Franciscanos a comienzos del siglo XVII, ofrece interesantes tallas de la escuela sevillana: el Cristo de la Misericordia y San Juan Bautista. Tampoco podemos olvidar las antiguas ermitas de San Telmo y San Amaro.

Hijos famosos de la ciudad portuense, son el fabulista Tomás Iriarte (1750-1791) y su tío Juan, erudita familia de la Ilustración, así como el ingeniero e inventor Agustín Bethencourt y Molina (1758-1824), creador de la Escuela de Ingenieros de Madrid y asesor de las vías de comunicación del gobierno ruso.