Las manifestaciones de arquitectura tradicional en La Victoria han quedado relegadas a un tercer plano, en la medida que tan solo se identifican algunas casas rurales en los espacios más agrarios del municipio, ya que la mayoría se tratan de edificaciones de reciente construcción. Pero las instalaciones más tradicionales suelen cumplir con los patrones de la arquitectura canaria, como lo son la sencillez y la utilización de materiales de la tierra, en su mayor parte piedras volcánicas. Sin embargo, más allá de algunos ejemplos repartidos, La Victoria de Acentejo no posee ninguna manifestación de arquitectura tradicional canaria especialmente destacable, salvo las que se identifican en el barrio de La Resbala, en donde si existen ejemplos más importantes. No obstante, sin contar las iglesias, el municipio no dispone de Bienes de Interés Cultural, salvo la Hacienda ex convento y Ermita de Santo Domingo, edificada en el siglo XVIII.
La Hacienda y Ermita de Santo Domingo, se encuentra casi al final de la Calle Santo Domingo. Fue construida en el año 1657 por Pedro de Ponte y Molina. La ermita servía como “parada y fonda” a los frailes dominicos que marchaban desde Santa Cruz hacia la isla baja y a finales del siglo XIX, pasó a ser propiedad del Conde del Palmar, constituyéndose el Patronato para dar instrucción a los niños más pobres de La Orotava. En la actualidad, las instalaciones cuentan con una vivienda de medianeros, una ermita, el nombrado Patronato de Instrucción y una bodega. Asimismo, la Hacienda subraya su importancia patrimonial por conservar un lagar único en toda Canarias. |