Con tan solo una rápida visual al territorio se puede afirmar que Los Silos posee un escenario idóneo para la práctica del turismo rural, pues tanto su inigualable paisaje (el macizo de Teno, el acantilado y la isla baja), como la presencia de verdes campos de cultivos y unas prácticas tradicionales, ponen de manifiesto las posibilidades y oportunidades para llevar a cabo un uso turístico responsable en el municipio. De igual modo, bien es sabido que el turismo rural y el turismo activo son dos modalidades que abogan por el uso responsable de los recursos y por el aprovechamiento de la oferta natural y cultural del espacio, y en ese sentido Los Silos capta dicho mensaje con la presencia de infraestructuras dedicadas a tal fin. Así pues, el municipio cuenta con 5 establecimientos de carácter rural, como  casas rurales y pequeños apartamentos que están cercas de fincas de cultivo y que contienen elementos arquitectónicos tradicionales canarios, sobre todo porque en su mayoría son antiguas casas que han sido remodeladas. De todas ellas las más destacables son la Casa Rural Monte del Agua y la Casa Aregume, en pleno centro histórico del pueblo.

Por otro lado, existe una gran cantidad de actividades de carácter deportivo que en ocasiones están diseñadas por empresas particulares. Entre dichas ofertas destacan las prácticas de buceo, la vela, el surf, los paseos a caballo, la pesca deportiva, kayak, vóley playa o el parapente, pero además el inmejorable marco natural, con entornos tan interesantes como la zona de Sitio de Interés Científico de Interián, los Acantilados de La Culata y o el Monte del Agua permiten que el turista amante del senderismo disfrute de una red de caminos que combinan lo mejor del entorno urbano, rural y por supuesto, natural del municipio.

Otros servicios

Además de la oferta y los servicios turísticos de carácter rural, Los Silos también cuenta con una serie de instalaciones relacionadas con el ámbito cultural y con la recreación. Entre ellos destaca la presencia de un Centro de servicio público dependiente y creado por la Administración Pública, en donde  se muestra buena parte del patrimonio histórico y natural del municipio, a través de una serie de unidades que puede ver el visitante, las cuales profundizan sobre la historia del lugar y las peculiaridades del entorno natural en el que se ubica.

Pero además el municipio también posee infraestructuras turísticas cercanas a la costa, en donde aparecen establecimientos de restauración y de recreación, como por ejemplo las piscinas municipales artificiales y un parque infantil con jardines a su alrededor. En las inmediaciones de las piscinas hay un paseo marítimo que camina al lado de la costa y de los numerosos charcos naturales existentes aptos para el baño. Dicho paseo lo completa la impresionante estampa del esqueleto de un Rorcual Boreal recientemente instalado en el municipio.

Principales senderos del municipios

El municipio, sobre la impronta de un inigualable paisaje, cuenta con una amplia red de senderos en las que se pueden apreciar valores tanto de carácter natural como etnográfico, la cual se encuentra en un buen estado de conservación y mantenimiento. Asimismo, aunque la variedad de senderos es más elevada, destacaremos algunos de los más llamativos y utilizados.

Sendero  de Cuevas Negras

El recorrido parte desde el propio casco de Los Silos y aumenta en altitud hasta la localidad de Cuevas Negras, para acabar finalmente a las puertas del Monte del Agua, en un entorno puro de laurisilva.

La principal utilidad de sendero histórico y tradicional fue facilitar la circulación de personas y animales de carga que acarreaban productos y mercancías de las medianías y de la cumbre, en tiempos en donde no existían las vías de comunicación que a día de hoy recorren la isla.   
Partiendo del centro de Los Silos hay un cartel que indica el inicio del camino, el cual poco a poco, y a medida que se ascendemos, se adentra en el medio natural, tras comprobar la presencia de un aislado ejemplar de Drago (Dracaena draco).

El sendero no tiene desviaciones, por lo que solo hay que continuar por el tramo empedrado. A medio camino del trayecto se llega al Caserío de Cuevas Negras. Estas edificaciones son una muestra de la arquitectura rural popular canaria, las cuales responden a los patrones típicos de las casas tradicionales, de dimensiones reducidas y con materiales obtenidos directamente de entorno y con un diseño básico. Desde ahí se puede acceder a pocos metros al Monte del Agua, una vez atravesado un camino en donde el visitante a podido disfrutar de notables vistas panorámicas de gran parte de la Isla Baja, además de sumergirse en un entorno gran diversidad florística, con ejemplares autóctonos como Barbusanos (Apollonias barbujana), Bencomias (Bencomia caudata), Laureles (Laurus azorica), Delfinos (Pleiomeris canariensis), entre otros.

Los Silos – Talavera- Las Lagunetas – Las Portelas – Martín Báez – Bolico – Cruz Gala – Cumbres de Erjos

12.5. La iglesia de Los Silos, desde donde comienza el sendero. (MP)

El recorrido se inicia en  la placita de la iglesia de Los Silos, junto a la Iglesia de la Virgen de La Luz, caminando por detrás del convento, por el callejón del Chorro el cual termina en una estrecha carretera transversal, desde allí se toma el camino La Cruzada, que le lleva a Pina  en donde tiene existe una pequeña llanada.

A partir de este punto es donde tiene lugar el comienzo de la subida a Talavera, a una distancia de unos 150 metros antes de un acueducto, hay que desviarse y subir en unas vueltas que llevan a pasar junto y por el costado derecho de una casita y un corral, a la vez que atraviesa unos canales desde donde va a subir al lado de unas tuberías teniendo como objetivos, que ve arriba, la caseta de distribución de aguas de la galería de El Caudal. Desde aquí, se sube por el camino que le va llevando hacia la ladera que mira al barranco de Los Pasos.  A pocos metros de comenzar este tramo puede existir una lejana posibilidad de vértigo, aunque no es demasiado elevada. Empieza una pequeña zona, Las Higueritas, en donde hay una menor pendiente: el camino, ahora algo perdido, va primero cerca del borde del barranco y luego en dirección a un barranquillo por el que sube, salva un salto, encajado sobre varios tramos de paredes de piedra que se quiebran en varias revueltas. Siguiendo el sendero se alcanza el Lomo Los Cardones, en la cabeza del barranco de Los Pasos, el cual se puede observar desde este punto.

Aproximadamente diez minutos más tarde se llega al Caserío de Talavera, las cuales se encuentran en la actualidad deshabitadas y sin techo.  Rebáselas y unos 20 metros después, gire hacia poniente, rodeando unos pinos. Si se sigue de frente iría, una centena de metros más arriba, a otra casetita del canal de la galería El Caudal, de donde parten las tuberías que han venido acompañando al visitante. En el final de un giro llega a la loma, entre pinos insignes, plantados para repoblar. La loma se encuentra en una camuflada era y enseguida pasa por el borde de otra. A partir de ahí se continua por una zona casi llana, donde desaparecen los pinos y queda un brezal de escaso porte. Caminando varios minutos más se llega a disfrutar de una gran vista del valle de El Palmar y del monte de Los Pasos; a partir de aquí se debe seguir por plena cresta, sin sombra, pero con la presencia de árboles.

12.6. Vista del Valle del Palmar. Foto: Francisca Fariña

Siguiendo el trayecto (aproximadamente una hora de recorrido desde el incicio) se llega a Las Almejeras o Las Mejeras Desde aquí se observa el monte de laurisilva y al otro lado del barranco de Los Pasos destaca en la cresta, el Pico de los Villanos. Aquí hay que dejar la cresta y bajar, en vueltas, por el camino resbaladizo de tierra rojiza. El siguiente punto, “Horno” se vislumbra desde aquí: una  roca empinada sobresale de entre los árboles. Enseguida hay un “manchón” de joven laurisilva. A pocos metros se llega a la Hoya Los Cojos en donde se debe bajar en dirección a “El Molino”. Se llega a la Hoya La Cumbrita en una pista que hay seguirla, ya que en poco menos de diez minutos se alcanza otra pista que viene del monte. Se continua bajando para pasar más tarde bajo Cueva la Hierba, ya cerca de Las Huertas, en donde se continua por la carretera hasta Las Lagunetas, luego el camino hasta Aruga y Portela Baja. Desde aquí se atraviesa la carretera a Masca; se debe bajar por una calle que se abandona en una curva, pasada las últimas casas y desciende por un estrecho camino. En este punto el caminante se encontrará con un barranco, el cual se deja seguir bajando por la pista. Ya llevaríamos aproximadamente dos horas de camino. En cincuenta metros hay que dejar el cauce en un giro y subir pasada la unión con un barranquillo hasta llegar a Tierras Viejas. Desde aquí se alcanza la nueva carretera por la que se debe ascender y antes de dos minutos se  deja por el antiguo camino durante en que luego se cambia de dirección para llegar a Martín Báez, en la carretera a Masca por la que baja menos de 40 metros, para luego subir por el camino que pudiera estar cerrado por algunas zarzas, en cuyo caso se puede intentar bordear hasta encontrar de nuevo la vereda hasta llegar a la Cancela.

Llegado a este punto hay que continuar ascendiendo durante varios minutos hasta las Casas de la Cumbre de Bolico. Pasa entre una era y las casas derruidas perpendiculares al camino, luego hay que dejar a un lado las dos pistas que confluyen aquí y atravesando un pequeño brezal, se encuentra el Saltadero, pasadas ya las tres horas desde el comienzo del sendero. Desde aquí se deja el camino que va hacia la Degollada de la Mesa.  Aproximadamente en un minuto se alcanza una pista por la que sube hasta encontrar otra que converge, hasta terminar en Cruz de Gala, desde donde continúa por la carretera hasta la Cumbre de Erjos dando con ello punto y final al sendero en un período de cuatro horas.