La riqueza cultural del municipio de Pájara queda también patente en la arquitectura domestica tradicional. Existen cuatro tipos de viviendas tradicionales; P�jara, el primer núcleo de población de la localidad donde varias casas que adornan las calles de núcleo capitalino; los núcleos costeros pescadores de Ajuy, Puerto de La Cruz, La Lajita, Morro Jable y Cofete donde podemos encontrar varios ejemplos de casas construidas de piedra seca asílos caseríos del interior como son Méndez, La Pared, El Cardón y el barrio de Totó; y finlamente las numerosas viviendas tradicionales dispersas por el territorio.

2.9. Núcleo pesquero de La Lajita un claro ejemplo de agrupamiento urbano de pescadores. (www.fuerteventuraenimagenes.com)

La vivienda tradicional en Pájara reúne las mismas características estructurales y materiales presentes en toda la isla. La casa humilde es lineal, en L o U, de una sola planta y a veces de dos, y de una dependencia a la que se van añadiendo más con el tiempo (comedor, sala de estar, cocina, dormitorio, corral, granero, etc.). El suelo es de tierra o de hormigón apisonado. La casa majorera posee un patio lateral cerrado por muros o central rodeado por las diferentes dependencias. La vivienda tradicional apenas tiene ventanas y si muchas puertas. Destaca la 'tahona', molino harinero tirado por una bestia o camello, como la situada frente a la iglesia y el Ayuntamiento y la ubicada en la C/Espigón, en el casco histórico.

2.10. Un ejemplo de la fachada de la vivienda tradicional majorera, con el encalado de cal y algunas piedras volcánicas al descubierto. (www.fuerteventuraenimagenes.com)

La casa es construida de piedra, como las situadas en el barrio de Cofete. A veces se le añade un encalando de cal dejando algunas piedras al descubierto. Sobre el encalado es común una franja de color que bordea la edificación. La vivienda apenas tiene ventanas y las puertas. Destacan los techos de torta de barro apisonado o de paja. En ciertas ocasiones el techo tiene forma rectangular e inversa a un tejado común para aprovechar el agua de la lluvia, agua que se almacena en un aljibe ubicado en el patio. También está el típico horno de pan.

Las viejas casonas burguesas recuerdan el paso de una burguesía agraria relacionada con el cultivo del cereal. Éstas se construyen con mortero de piedra, cal y barro, pintada habitualmente de barro, con sillares en esquineros y portadas. Las hay de uno y dos pisos, de plantas variadas, patio interior en alguna de ellas, escaleras y balcones de madera y techos de teja árabe. En la casa noble abunda el uso de la piedra y la madera decorada en balcones, puertas y ventanas. El aljibe para almacenar el agua de las lluvias es elemento primordial en los patios de las casas debido a las repetidas sequías.

2.11. El caserío de Totó, al norte de la localidad, reúne varios ejemplos de viviendas tradicionales. (PTF)