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  EXPRESIÓN MUSICAL    
 
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3. MOVIMIENTOS Y ACTIVIDADES MUSICALES

A finales de la década de los años sesenta se observa un resurgir de la música tradicional en general. Este fenómeno se aprecia, de manera especial, en Canarias, en donde van apareciendo numerosos grupos folklóricos, como en pocos lugares del mundo.

Aumentan los festivales y recitales de este género, casi siempre con ocasión de las fiestas de los pueblos. La radio y la televisión incluyen también dentro de sus programas este tipo de manifestaciones.

Hay que reconocer el esfuerzo de los folkloristas en rescatar, recopilar y divulgar todo aquello que estaba siendo olvidado o falseado, contribuyendo con ello a nuestro enriquecimiento cultural.

Un momento importante lo constituyó la celebración en Telde (Gran Canaria), en Junio de 1976, del «Primer encuentro de música popular canaria», con intervención de destacados solistas y agrupaciones. En él se hizo público un manifiesto en el que se resaltaba la necesidad de seguir investigando el folklore musical, promocionarlo, velar por su pureza y protegerlo.

Es necesario mostrar las distintas manifestaciones y movimientos musicales, diferenciando, a su vez, la música tradicional de la música popular actual.

GRUPOS POPULARES TRADICIONALES

Dentro de la música tradicional o folklore musical de Canarias, sería injusto olvidar a los verdaderos protagonistas que han mantenido las tradiciones. Nos estamos refiriendo a todos esos grupos populares, especialmente las parrandas, que han dado vida a nuestros cantares y a las manifestaciones tradicionales festivas. Como ejemplos de este folklore musical, citaremos, entre otros, «el baile del tambor de Chipude» (La Gomera), «el baile de la Virgen» (El Hierro), «el tajaraste de El Amparo» (Tenerife), etc. Igualmente hay que citar a personajes como Sebastián Ramos, «El Puntero»,  o Valentina la de Sabinosa. Esta es la base de la música popular actual con raíces folklóricas.

FOLKLORE DE POSTGUERRA

A partir de los años 40, además de la labor de base de la Sección Femenina, hay que citar grupos y solistas de exhibición folklórica como «Los Huaracheros», María Mérida, Mary Sánchez, Olga Ramos, Familia Rodríguez de Milán, etc.

LOS SABANDEÑOS, UN GRUPO ÚNICO

Luego surgen «Los Sabandeños», allá por el año 1966, cuya repercusión en la cultura canaria ha sido decisiva, siendo su promotor, director y compositor principal el periodista y político Elfidio Alonso. Ellos han recogido la tradición popular y la han recreado. Este grupo tiene influencias del folklore sudamericano y ha dedicado parte de su obra a cantar a Hispanoamérica. Pasado la treintena de años desde su aparición, continua cosechando éxitos dentro y fuera de Canarias.

Los Sabandeños han cosechado éxitos dentro y fuera de Canarias, recreando con un estilo propio la tradición porpular. El día.

PROLIFERACIÓN DE GRUPOS FOLKLÓRICOS

A raíz de la aparición de «Los Sabandeños», surgieron numerosos grupos de música popular con raíces folklóricas. De entre ellos, citamos a «Los Campesinos», por Lanzarote; «Los Sancochos», «Los Gofiones», «Mestisay», por Gran Canaria; «Los Chincanayros», «Verode», «Añoranza», por Tenerife;  «Los Arrieros», por La Palma; etc.

La eclosión de los grupos folklóricos ha continuado en los años 90. A título de ilustración diremos que sólo en La Laguna (Tenerife), en 1997, existían más de 40 grupos organizados.

INVESTIGANDO EN LA RIQUEZA DEL FOLKLORE

En estos mismos años aparecen otros grupos que tratan de recoger la tradición con mayor fidelidad. Para ello desarrollan una metodología basada en la investigación de campo, utilizando encuestas, reviviendo eventos tradicionales, haciendo registros audiovisuales y estando en estrecha convivencia con los ancianos de los lugares en que la cultura tradicional ha podido conservarse mejor, convirtiéndose éstos, a su vez, en maestros. Esta inquietud suele estar ligada a proyectos educativos o escolares. En este sentido podemos mencionar a «Los Alzados» de Icod el Alto (Los Realejos), con el empuje de Carmen Nieves Luis; al de la Escuela de Magisterio de La Laguna, con la iniciativa de Manuel Fariña y continuidad de Manuel Lorenzo Perera; al grupo Echentive, de La Palma, promovido por Juan José Santos; y, especialmente, al grupo de La Aldea (Gran Canaria), convertido en un museo vivo, gracias a la labor entusiasta de José Suárez Espino y Lidia Sánchez González. En otra línea diferente de trabajo, de recuperación y recreación, hay que citar la labor de la Agrupación Folklórica Universitaria (AFU), promovida por Benito Cabrera, colectivo en el ámbito de la Universidad de La Laguna, que sensibilizó a la población universitaria y recuperó bailes como el candil. Aquí, también hay que mencionar la labor de José A. Pérez, en Gran Canaria, y Juan de la Cruz, en Tenerife, de rescatar la vestimenta tradicional.

FOMENTO EDUCATIVO Y PARTICIPACIÓN POPULAR

Hay que destacar tres hechos significativos en el desarrollo del folklore canario:

- La creación de escuelas de folklore canario, especialmente en Tenerife, con iniciativas de ayuntamientos como el de Arona, Adeje, Santa Cruz, La Matanza, Puerto de la Cruz, etc., posteriormente apoyada por el Cabildo Insular de Tenerife.

- La labor del Centro de la Cultura Popular Canaria propiciando conexiones y apoyo a grupos folklóricos y, en especial,  creando una importante fonoteca de música tradicional.

- La propagación de lo folklórico en múltiples romerías populares que se ha extendido a numerosas localidades de las islas; así como los «bailes de mago o de mauro», donde, cada vez más, no sólo se impone el traje típico, sino también la música y las danzas tradicionales canarias.

CANTAUTORES DE LOS SETENTA

A comienzos de los setenta, surge en la Universidad de La Laguna la «Nueva Canción Popular Canaria», con gran carga social, preocupación por pueblos y barrios, y con marcado acento de la identidad y sentimiento canario.  Conforme se fue consolidando, se dieron en su seno distintas corrientes, desde las más universal hasta la más nacionalista.

En Tenerife, los primeros grupos, con este tipo de canción, fueron «Sangre Inocente» y «Amén». A nivel individual, destacaron José Manuel Abreu, Julio Fajardo y Manuel Luis Medina, entre otros. En Gran Canaria cabe citar a los grupos «Magma 12» y «Vacaguaré».

A mediados de la década de los años setenta parece cristalizar esta generación de nueva canción popular a través de grupos como «Taburiente», «Surco», «Pueblo Tanco», «Palo», «Garoé», «Canto 7», «Chácara», «Pluma y Voz», etc., y de cantautores como Juan Carlos Senante, Vicente Umpiérrez, Suso Junco, Pepe Paco, Ángel Cuenca, Juvenal, Juan M. Santana, etc.

CANTAUTORES DE LOS OCHENTA Y LOS NOVENTA

A comienzos de los años ochenta, el movimiento pierde fuerza, si bien a mediados de esta década surgen algunos cantautores, que tratan de dar continuidad a lo iniciado. Entre ellos, Pedro Manuel Guerra, Andrés Molina, Rogelio, que forman el «Taller Canario de Canción», Marisa, Alberto Cañete, Lito, J.L. Calcines, etc.

Posteriormente, en la segunda mitad de los noventa, Rosana Arbelo y Pedro Manuel Guerra se sitúan entre los cantautores más destacados de la canción española.

Rosana Arbelo y Pedro Manuel Guerra, dos cantautores de máximo éxito en el panorma musical español. Eco-press.
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