Son espacios o elementos naturales de dimensión reducida, que son objeto de protección especial por sus singulares características, rareza o belleza. Pueden ser formaciones geológicas, yacimientos paleontológicos y demás elementos que son objeto de un interés especial por la singularidad o importancia de sus valores científicos, culturales o paisajísticos. Son espacios protegidos de categoría III, según la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Medios Naturales).

Monumento Natural del Barranco de Fasnia y Güímar

MN del Barranco de Fasnia y Güímar, también conocido como Barranco de Herques. (DM)

Se trata del Barranco de Herques, uno de los más largos y accidentados de la Isla de Tenerife. Nace en las proximidades de Izaña, lindando su extremo norte con el Parque Natural de la Corona Forestal, y desemboca en la costa, concretamente en la Playa de Callao. Tiene paredes abruptas que llegan a alcanzar los 100 m de altura, numerosos barranquillos secundarios que desaguan en su interior y algunos saltos importantes en su cauce. Los materiales predominantes son basaltos de las Series II y III, junto con algunas manifestaciones de tobas pumíticas. Su importancia no es solamente por aspectos geomorfológicos, sino que en 1770 se descubrió en él, uno de los enterramientos aborígenes más importantes que se conocen, en la llamada Cueva de las Mil Momias.

En el interior del barranco existe una gran variedad de vegetación, predominando en las cotas más bajas las poblaciones de balos (Plocama pendula), tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera), cardón (Euphorbia canariensis) y tabaiba majorera (Euphorbia atropurpurea). También hay otras representaciones como del marmulán (Sideroxylon marmulano), el trébol de risco (Dorycnium eriophthalmum), la cerraja (Sonchus gummifer) o la corregüela (Convolvulus perraudieri).

En cuanto a la fauna, existen diversas especies de aves que nidifican en las paredes del barranco, como el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), la lechuza común o ‘coruja’ (Tyto alba) o el búho chico (Asio otus canariensis). También están presentes otras como el vencejo unicolor o ‘andoriña’ (Apus unicolor), o dos especies de murciélagos (Tadarida teniotis y Pipistrellus maderensis).

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Monumento Natural Montaña Centinela

MN Montaña Centinela. (AMAPCIT)

Se trata de una estructura geomorfológica singular, representada por un cono volcánico basáltico de la Serie III y sus coladas asociadas, que posteriormente fueron cubiertas por materiales sálicos de la misma serie. Tiene 269 m de altitud, y es uno de los volcanes insulares en mejor estado de conservación.

Entre las comunidades vegetales, son abundantes las tabaibas dulces (Euphorbia balsamifera), cardones (Euphorbia canariensis), cardoncillos (Ceropegia fusca), balos (Plocama pendula), turneros (Helianthemum canariense), y como primeros colonizadores de las coladas, los líquenes. También hay una variada representación faunística, aves como currucas tomilleras (Sylvia conspicillata orbitalis), mosquiteros (Phylloscopus collybita canariensis), camachuelo trompetero o ‘pájaro moro’ (Bucanethes githaginesa) o cernícalos (Falco tinnunculus); y reptiles como el lagarto tizón (Gallotia galloti), la lisa (Chalcides viridanus) o el perenquén (Tarentola delalandii).

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Monumento Natural de Los Derriscaderos

MN de Los Derriscaderos. (DM)

Este Espacio Natural Protegido consiste en un tramo de barranco de cauce amplio, donde confluyen tres diferentes: barrancos del Mocán, del Helecho y de las Monjas. Es una zona con interesantes acumulaciones por aluvión, pero destaca concretamente la conocida como Los Derriscaderos, formada por tobas pumíticas de las Series II y III que han sido modeladas por la erosión eólica. También hay zonas donde afloran puntualmente coladas basálticas y aglomerados de la Serie III, a los que se superponen coladas fonolíticas del mismo periodo.

Vegetalmente sobresalen tabaibas dulces (Euphorbia balsamifera), cardones (Euphorbia canariensis), cardoncillos (Ceropegia fusca) y el corazoncito (Lotus sessilifolius). En cuanto a la fauna, destacan algunas aves que llegan a nidificar en la zona, como la paloma bravía (Columba livia), el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), el camachuelo trompetero (Bucanetes githaginea) o la lechuza común o ‘coruja’ (Tyto alba). También hay presencia de reptiles como el lagarto tizón (Gallotia galloti) o el perenquén (Tarentola delalandii).

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Monumento Natural de Las Montañas de Ifara y Los Riscos

Tiene una extensión de 288,1 ha, en el término municipal de Granadilla de Abona. Este espacio alberga dos conos volcánicos que constituyen hitos paisajísticos de interés geológico en el sur de la Isla.

Se trata de Montaña de Ifara (el más alejado del mar), y Montaña de Los Riscos. Están afectados por varios barranquillos, pero este último volcán, posee un espectacular corte en su flanco oeste como consecuencia de la erosión del barranco del Callao. Están formados por piroclastos basálticos de la Serie III, y durante su actividad eruptiva, emitieron coladas que rodearon Montaña Pelada y llegaron hasta el mar.

MN de Las Montañas de Ifara y Los Riscos. (AGA)

La vegetación, como es característico en estos conos volcánicos, esta representada por tabaibas y cardones en su mayor parte, con algunas representaciones de balos (Plocama pendula) y turnero (Helianthemun canariense). Entre la fauna vertebrada destaca el bisbita caminero (Anthus berthelotii), la curruca tomillera (Sylvia conspicillata) y el camachuelo trompetero o ‘pájaro moro’ (Bucanetes githaginea). Entre los invertebrados, más importantes aquí, existen endemismos como los escarabajos longicorios (Stenidea albida y Lepromoris gibba).

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Monumento Natural de Montaña Pelada

MN de Montaña Pelada. (DM)

Es un espacio de gran interés geológico, constituido por una caldera de explosión que se creó al entrar en contacto el magma con aguas marinas superficiales (actividad freatomagmática). Está formado principalmente por traquibasaltos de la Serie II, aunque también hay tobas pumíticas de la Serie III en el interior del cráter. Éste, presenta un aspecto achatado debido a la disposición que fueron tomando los materiales arrojados durante la erupción, favorecidos por la presencia de agua. Su estructura ha sido fuertemente desmantelada por la acción marina, por lo que se cree que antiguamente existía otra caldera donde hoy llega el mar. Otro atractivo de este espacio, es la presencia de una duna fósil junto a la playa.

En cuanto a la vegetación, destaca la presencia de tabaibas dulces (Euphorbia balsamifera), y dentro del cráter, son más abundantes los balos (Plocama pendula). Nidifican algunas aves como la pardela cenicienta (Clonectris diomedea), la paloma bravía (Columba livia) y el camachuelo trompetero o ‘pájaro moro’ (Bucanetes githaginea). También hay reptiles como el lagarto tizón (Gallotia galloti) y el perenquén (Tarentola delalandii).

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Monumento Natural Montaña Colorada

A pesar de no apreciarse con facilidad, se trata de un conjunto de edificios volcánicos de diverso origen, que han quedado ocultos por la vegetación circundante. El cráter más antiguo es Lomo de Simón, un domo de extrusión que arrojó coladas sálicas al final de la Serie Cañadas, hace 500.000 años aproximadamente, quedando desmantelado por la erosión. Posteriormente se formaron otros tres conos volcánicos: Montaña de Las Mesas, Montaña Colorada y Montaña Rica; de tipo basáltico pertenecientes a la Serie III, arrojando materiales que terminaron sepultando los anteriores.

MN Montaña Colorada. (DM)

Entre la vegetación destaca el pinar canario (Pinus canariensis), que se asienta sobre los materiales sálicos. También hay presencia de jaras (Cistus symphytifolius y Cistus monspeliensis), espárragos (Asparagus plocamoides), bejeques (Aeonium spathulatum) y cerrajas (Sonchus acaulis).

La fauna no es muy importante en este espacio, solo son reseñables algunos insectos ligados al pinar y aves como el gavilán (Accipiter nisus) o el búho chico (Asio otus).

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Monumento Natural del Roque de Jama

Este Monumento Natural constituye la mayor formación rocosa del Valle de San Lorenzo, que con una altitud de 773 m, destaca notablemente sobre el paisaje que le rodea. Es un pitón fonolítico de la Serie I, que se ha formado bajo superficie y ha quedado expuesto debido a una intensa erosión diferencial de los materiales que lo rodean, de tipo basáltico.

Existe un tabaibal-cardonal que se mantiene hasta cotas superiores, que ha estado afectado históricamente por un intenso pastoreo. Hay presencia de vegetación termófila, sabinas (Juniperus phoenicea) que se localizan de manera puntual en lugares escarpados, donde también se pueden encontrar acebuches (Olea europaea) y almácigos (Pistacia atlantica). Hay algunos ejemplares aislados de pino canario (Pinus canariensis) y, en zonas muy localizadas, el bicácaro (Canarina canariensis) y la retama gris (Teline osyroides). También predominan especies introducidas tan características como la pitera (Agave americana) y chumbera (Opuntia ficus-indica), también llamada esta última tunera o penca.

MN Roque de Jama. (GOBCAN)

Entre la fauna destacan las aves, como el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), el vencejo unicolor o ‘andoriña’ (Apus unicolor), la lechuza común o ‘coruja’ (Tyto alba) o el bisbita caminero (Anthus berthelotii). También especies tan llamativas como el murciélago rabudo (Tadarida teniotis).

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Monumento Natural de la Montaña Amarilla

Este Monumento Natural, es un edificio volcánico que forma parte de una cadena de conos situados en el sur de la Isla. Se formó por actividad freatomagmática, con erupciones muy explosivas al entrar en contacto el magma con aguas superficiales. Su proximidad al mar ha provocado que parte de su estructura se haya destruido por erosión, dejando al descubierto llamativos estratos de piroclastos y una interesante duna fósil en su base. El cono está constituido por traquibasaltos de la Serie III, aunque en su sector oriental, hay materiales basálticos del mismo periodo procedentes de otros volcanes cercanos.

MN de la Montaña amarilla. (ASMA)

La vegetación es poco abundante, aunque con tabaibas dulces (Euphorbia balsamifera) como elemento representativo. También hay presencia de especies que habitan lugares afectados por la maresía, pero sólo en la vertiente expuesta al océano. Son la piña de mar (Atractylis preauxiana), endemismo de Gran Canaria y Tenerife, aunque en esta última está prácticamente extinguida; el salado (Schizogyne sericea) y la lechuga de mar (Astydamia latifolia), cuyas hojas formaron parte de la dieta de antiguos marineros por su alto contenido en vitamina C y por facilitar la digestión.

La fauna no es muy abundante, destacando aves como cernícalos (Falco tinnunculus), palomas bravías (Columba livia) o currucas tomilleras (Sylvia conspicillata orbitalis).

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Monumento Natural de la Montaña de Guaza

MN de la Montaña de Guaza. (DM)

Es uno de los domos volcánicos exógenos más representativos de la Isla, constituido por una serie de potentes coladas sálicas de la Serie III, que por su viscosidad, solidificaron cerca del centro eruptivo. Esto generó una amplia llanura que termina en un imponente acantilado marino, que puede apreciarse desde el núcleo turístico de Los Cristianos.

A pesar del antiguo uso antrópico que se dio a la zona, aún pervive una comunidad de cardonal-tabaibal en la llanura del edificio volcánico, en las denominadas Mesas de Guaza. En diversas zonas del Monumento, se dan otras especies vegetales como el cardoncillo (Ceropegia fusca), la corregüela (Convolvulus fruticulosus), el tomillo marino (Frankenia laevis) o la siempreviva (Limonium pectinatum).

La Montaña de Guaza es un lugar idóneo para que nidifiquen algunas aves marinas. Entre ellas está la pardela cenicienta (Calonectris diomedea), la gaviota patiamarilla (Larus cachinnans), y se cree que también lo hace el petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii), aunque no se ha contrastado. Hay presencia de otras aves como el camachuelo trompetero o ‘pájaro moro’ (Bucanetes githaginea), el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) o el alcaraván (Burrhinus oedicnemus); y de reptiles como lagartos y lisas.

Como datos curiosos, cabe citar que se han encontrado en este lugar, algunos enterramientos prehispánicos y restos subfósiles de ratas y lagartos gigantes ya extinguidos.

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Monumento Natural de la Caldera del Rey

Se trata de una de las tres mejores muestras de vulcanismo freatomagmático-explosivo de Tenerife. Es una amplia caldera que se creó al entrar en contacto el magma con el agua, favoreciéndose así la explosividad de la erupción por la liberación de gases que se producen. En la mayor parte de este Monumento Natural predominan los materiales sálicos, aunque en su zona más septentrional hay materiales basálticos antiguos que pertenecen al Macizo de Adeje.

MN de la Caldera del Rey. (DM)

Dentro de la Caldera existe una actividad agrícola reseñable, con cultivos de plataneras y plantas ornamentales. Esto, ha hecho que el paisaje deje de tener ‘naturalidad’ debido a las infraestructuras necesarias para dicha actividad (carreteras, instalaciones hidráulicas, etc.). A pesar de ello y del intenso pastoreo que se ha dado históricamente en la zona, en algunos puntos aún persiste una comunidad importante de cardonal-tabaibal.

Aquí, las aves son el tipo de fauna más significativa, dejándose ver algunos ejemplares de cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) y de camachuelo trompetero o ‘pájaro moro’ (Bucanetes githaginea).

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Monumento Natural del Teide

MN del Teide. (DM)

Este Monumento Natural constituye el volcán por excelencia de las Islas Canarias, que con 3.718 m, es la altitud máxima de todo el territorio español y la Macaronesia. Está situado dentro del Parque Nacional del Teide y constituye un elemento emblemático de gran interés científico, destacando sus particulares características geomorfológicas que definen un paisaje de gran belleza.

El Monumento Natural incluye el complejo volcánico Teide-Pico Viejo, un gran estratovolcán que permanece activo. Este hecho se demuestra con las fumarolas que emite desde su cráter y con las erupciones históricas que han acaecido no hace mucho tiempo atrás (la última fue en 1798, la de Narices del Teide).

Fundamentalmente está compuesto por materiales basálticos, pero en superficie, predominan los sálicos como traquitas y fonolitas. Son más abundantes en Pico Viejo y en los domos que se encuentran en la base del Teide, como Montaña Blanca o Montaña Majúa, responsables de muchos depósitos de piroclastos de piedra pómez o ‘zahorra’.

Históricamente, el Teide ha sido una fuente de materias primas para los isleños. Primero los ‘guanches’ obtenían obsidiana para fabricar armas cortantes, y mucho más tarde, hasta hace pocas décadas, se extraía azufre del cráter y se obtenía hielo de algunas cuevas.

La vegetación existente es similar en la caldera de Las Cañadas que en el propio cono. A partir de los 2.500 m de altitud, las condiciones climáticas son tan duras que sólo lo soportan algunas especies, como el popular endemismo del Parque, la violeta del Teide (Viola cheiranthifolia). Otras individuos son la hierba conejera (Silene nocteolens) o el cardo de plata (Stemmacantha cynaroides), éste último en peligro de extinción por ser parte de la dieta del muflón. Aunque para hábitats insospechados, tenemos algunas especies de musgos y a la borriza (Gnaphalium teydeum), en las fumarolas y tierras calientes.

La fauna es muy variada, con numerosos endemismos dentro del grupo de los invertebrados, mamíferos endémicos como el murciélago orejudo (Plecotus teneriffae) o reptiles como el lagarto tizón (Gallotia gallotii), que ha sido localizado hasta en la cima del Teide. La fauna introducida es importante, representada por el conejo (Oryctolagus cuniculus), el erizo moruno (Atelerix algirus) o el muflón (Ovis aries), introducido en 1971 por motivos cinegéticos y que se ha convertido en un verdadero problema que hay que controlar.

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Monumento Natural de la Montaña de Tejina

Se trata de un impresionante domo volcánico que destaca en el paisaje del suroeste insular. Parte de su estructura fue desmantelada por la formación del Barranco de Guaría, a uno de sus lados. Está formado principalmente por fonolitas y traqui-basaltos, materiales de naturaleza ácida de la Serie II.

Este Monumento Natural y su espacio circundante, es muy rico vegetalmente. Hay algunas especies concretas como el jócamo (Teucrium heterophyllum) o el cerrajón (Sonchus canariensis); pero sobre todo, destacan las formaciones termófilas. Sus representantes son peralillos (Maytenus canariensis), dragos (Dracaena draco), almácigos (Pistacia atlantica) y sabinas (Juniperus turbinata ssp. canariensis).

MN de la Montaña de Tejina. (DM)

La fauna más importante de este espacio lo constituyen las aves, que poseen multitud de lugares para nidificar por lo accidentado del terreno. Además del cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), hay otras rapaces como el ratonero común o ‘aguililla’ (Buteo buteo), que suele construir su nido en las cornisas de las paredes de barrancos. También hay presencia de palomas bravías (Columba livia), pardelas cenicienta (Calonectris dionedea) y de murciélagos rabudos (Tadarida teniotis), que son los de mayor tamaño en Canarias.

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Monumento Natural del Roque de Garachico

MN del Roque de Garachico. (SG)

Su origen está asociado a las coladas basálticas de la Serie III, que llegaron hasta este lugar procedentes de volcanes cercanos. El posterior modelado marino, ha provocado que este Roque esté aislado de la costa, quedando como un vestigio de la distancia y dimensión que llegó a alcanzar la plataforma costera de Garachico.

Está cubierto principalmente por un manto de tabaibas dulces (Euphorbia balsamifera), aunque también hay presencia de salados (Salsola divaricata), perejil de mar (Chrithmum maritimum), esparragueras (Asparagus umbellatus), magarzas (Argyranthemum frutescens) o alguna muy rara como la siempreviva (Limonium imbricatum).

La fauna que presenta tiene especies amenazadas como la pardela chica (Puffinus assimilis), el petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii) y el paiño de Madeira (Oceanodroma castro), aves marinas que suelen habitar en roques y acantilados. También están presentes las gaviotas patiamarillas (Larus cachinnans) y algunas especies migratorias.

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Monumento Natural de La Montaña de Los Frailes

Es un pequeño cono volcánico que constituye un elemento paisajístico singular y de referencia dentro del Valle de La Orotava. Es un cono de piroclastos o de Cinder que data aproximadamente del siglo XVIII, formado por la acumulación de los materiales de proyección aérea en torno a la boca eruptiva. Este material fue lapilli ácido, denominado popularmente ‘picón’, ‘rofe’ o ‘granzón’ según las diferentes Islas.

De la misma naturaleza son algunos volcanes cercanos como la Montaña de Las Arenas o la Montaña de Las Gañanías, que juntos constituyen una alineación de tres volcanes con dirección noreste-suroeste. Fueron erupciones fisurales que arrojaron lavas basálticas, rellenando parte del antiguo Valle de La Orotava y llegando incluso al mar.

MN de la Montaña de Los Frailes, en el Valle de La Orotava. (DM)

La vegetación no es muy abundante. Debió estar dominada potencialmente por un importante tabaibal, pero actualmente está muy degradada. Sólo existen ejemplares de un tipo de helecho (Pteridium aquilinum) y la gramínea invasora conocida como ‘rabo de gato’ (Pennicetum setaceum), auténtica plaga para la vegetación autóctona. También se pueden encontrar algunos cultivos dispersos, producto de actividades agrícolas locales.
La fauna no es muy abundante, aunque se pueden apreciar algunas aves como el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) o el vencejo unicolor o ‘andoriña’ (Apus unicolor).

En la cima de la Montaña, se encuentra la pequeña Ermita de La Cruz, a la que asciende cada año un gran número de peregrinos el día 3 de Mayo para celebrar la Fiesta de La Cruz.

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