Buscar
Búsqueda avanzada
  7. MEDIO AMBIENTE    
 
    Índice de contenidos
    Temas relacionados
    Enmarque del tema
    Complementos
    Material multimedia
      Imágenes
      Videos
      Animaciones
 
    Léxico
    Artículos de ampliación
    Aportaciones externas
    Notas eruditas
    Orientaciones y debate
    Bibliografía
  Versión para imprimir Escuchar artículo Metadata Patrocinadores Aumentar letra Disminuir letra  


Principales problemas ambientales

Las Islas Canarias, con sus algo más de 7.492 km², tiene según datos del ISTAC de 2006, una población total de 1.995.833 de habitantes. A ello hay que sumarle población no registrada como los doce millones de turistas que visitan cada año el Archipiélago, estudiantes, trabajadores temporales… Todo esto supone una carga muy difícil de afrontar para un territorio tan limitado, por ello se hace necesario una planificación y una gestión adecuada de los recursos.

Además, al canario, no se le debe escapar que en pleno siglo XXI estamos ante una situación de ‘cambio climático’ que afecta a todo el planeta, y de la cual Canarias no es ajena. Los últimos informes de los expertos apuntan a una subida del nivel de las aguas debido al calentamiento de la Tierra. Este hecho trae a Canarias consecuencias desastrosas, ya que llevaría aparejado la desaparición de muchas playas, las cuales son reclamo del turismo, auténtico ‘monocultivo’ a día de hoy de la economía isleña. Además, el proceso de cambio climático global también producirá cambios en el régimen de las precipitaciones y mayores sequías, por lo que la aridez de las Islas se puede ver acentuada.

Concretamente en la actualidad, Canarias presenta una serie de problemas ambientales que necesitan una planificación y gestión adecuada, y en muchas casos, una alternativa a ciertos modelos de desarrollo que están afectando al medio ambiente de las Islas. (Debate sobre el mundo rural y natural de Gran Canaria, Problemas y logros en relación al Patrimonio Natural de Tenerife).

Contaminación atmosférica

El vehículo privado inunda las carreteras canarias, con la consiguiente emisión de gases de efecto invernadero. (el dia)
Canarias sufre uno de los mayores índices de contaminación atmosférica del Estado. En la última década ha aumentado en un 83% sus emisiones de efecto invernadero. Se emiten a la atmósfera 12.000.0000 toneladas de CO2 (76% por la producción de electricidad y 23,3% por la circulación de automóviles), a lo que habría que añadirle las emisiones de la refinería de Santa Cruz de Tenerife, o el transporte aéreo. Según Manuel Cendagorta, Director del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), el Archipiélago depende en un 97% del petróleo, por lo que se hace necesaria la búsqueda de otras alternativas a las energías contaminantes. Cierto es que en los últimos años los paisajes isleños han empezado a llenarse de molinos de vientos, y en los tejados de muchas casas se pueden ver paneles solares, pero estas energías renovables sólo representa un escaso 3% del total de la energía que se consume.

Volver al índice

La degradación del suelo y los acuíferos

El suelo es un recurso natural no renovable a corto-medio plazo. La pérdida de suelo, especialmente el agrícola, puede estar provocada tanto por agentes físicos externos, como el agua, las variaciones de temperaturas, el viento, o sobre todo por la actividad humana. En Canarias, básicamente, es la mano del hombre la que está detrás de este proceso. El abandono de las actividades agrarias y forestales, los incendios, la extracción de áridos, y especialmente las obras de grandes infraestructuras (carreteras, pistas aeroportuarias…) y la ocupación del espacio rural por nuevos proyectos de urbanizaciones, campos de golf, polígonos industriales…, son acciones que llevan a la inutilización futura de los suelos, y a que el 44% de éstos sufran desertificación.

Por su parte, la contaminación y la sobreexplotación de los acuíferos es otro de los graves problemas a los que se enfrenta el Archipiélago. En los últimos años, y debido al crecimiento poblacional y la disminución del nivel de los acuíferos, se ha hecho necesario buscar métodos no naturales que garanticen el recurso del agua (plantasdesaladoras y potabilizadoras, plantasdepuradoras de aguas residuales…).

La pérdida de suelo cultivable así como la captación sostenible de agua son graves inconvenientes para las Islas, debido a la dependencia del exterior para el suministro alimentario y el petróleo para obtener el agua (desaladoras…).

Volver al índice

La edificación agresiva y el proceso de ‘rururbanización’.

En Canarias se viene produciendo una destrucción progresiva del suelo rústico, especialmente de antiguas zonas de plataneras, debido a la construcción desmesurada, y en muchas ocasiones sin planificación, de hoteles, apartamentos, villas…A esto hay que añadir el rápido crecimiento de las zonas suburbanas, con una construcción masiva y desproporcionada, manteniendo escasos espacios verdes. Tradicionalmente en las Islas se ha llevado a cabo un proceso de autoconstrucción de viviendas, un modelo anárquico y poco cuidadoso con el paisaje en el que se integran.

En los últimos años, y fruto de las pautas que marca una sociedad moderna, se está produciendo un fenómeno curioso y dañino para la agricultura y ganadería isleña. La idea que se tiene del campo ha comenzado a cambiar. Se trata de una concepción turístico-residencial de lo que hasta hace poco era un espacio de producción de alimentos, y por lo tanto un espacio que contribuía a la economía del Archipiélago. Es lo que se conoce como ‘rururbanización’, es decir, la urbanización del medio rural. Se trata de un proceso que se puede ver materializado en municipios cercanos a las a capitales insulares como Tacoronte, Tegueste o El Sauzal en Tenerife, Santa Brígida y Arucas en Gran Canaria, Breña Alta y Puntallana en La Palma, o San Bartolomé en Lanzarote. La gente huye de la masificación y el ruido de las ciudades en busca de la tranquilidad y la calidad de vida del campo, pero curiosamente sin renunciar a seguir manteniendo su estilo de ‘vida urbana’.

Volver al índice

La gestión de los residuos y los vertidos incontrolados

Las Islas producen millones de toneladas de basura al año. La mayor parte de esos residuos son generados en el ámbito urbano. Su proliferación se debe fundamentalmente al fortísimo crecimiento poblacional que está sufriendo el Archipiélago, a lo que habría que añadirle un aumento en el nivel de vida, que en el caso de los residuos se traduce en un crecimiento de los mismos.

El problema de qué hacer con la basura que se genera cobra especial preocupación en un territorio insular, por eso los conceptos de prevención, reciclado y valorización, establecidos por la Estrategia de Residuos de la Unión Europea, toman una importancia fundamental.

Con la reducción en la generación de residuos, la promoción de ‘puntos limpios’ para la recogida de éstos, y el tratamiento respetuoso con el medio ambiente de los que se producen, se evitaría además la proliferación de vertidos incontrolados y cementerios de residuos que salpican algunos paisajes de las Islas.

En muchas ocasiones los bordes de carreteras o solares abandonados sirven como auténticos vertederos incontrolados donde se acumulan todo tipo de basuras. (DM)

Volver al índice

La ‘superpoblación’

La ‘superpoblación’ que actualmente sufre el Archipiélago genera una importante presión sobre el territorio y una demanda de recursos e infraestructuras muy difícil de afrontar para las Islas. (TB)

Las Islas Canarias poseen una población próxima a los dos millones de habitantes, a lo que hay que sumarle lo que se conoce como población flotante, turistas que se cuentan por millones, trabajadores temporales, estudiantes, inmigrantes sin papeles…En los últimos tiempos, coincidiendo con el desarrollo económico de las Islas, se da el fenómeno inverso al acaecido durante décadas pasadas, y la inmigración es mucho más relevante que la emigración (de extranjeros y, especialmente, de peninsulares). A lo que hay que añadir además, el regreso de mucho de los emigrantes canarios o descendientes de éstos, dada la situación desfavorable que se vive en los países sudamericanos. El aumento de la población lleva aparejados importantes impactos ambientales, necesidad de nuevas viviendas, demanda de agua y energía, generación de residuos, en resumen, uso del territorio y sus recursos, lo cual en Canarias se presenta como un grave problema ambiental por lo reducido de sus dimensiones.

Volver al índice

  2/3