Buscar
Búsqueda avanzada
  MUNICIPIO DE SAN MIGUEL DE ABONA    
 
    Índice de contenidos
    Temas relacionados
    Enmarque del tema
    Complementos
    Material multimedia
      Imágenes
      Videos
      Animaciones
 
    Léxico
    Artículos de ampliación
    Aportaciones externas
    Notas eruditas
    Orientaciones y debate
    Bibliografía
  Versión para imprimir Escuchar artículo Metadata Patrocinadores Aumentar letra Disminuir letra  


5. MEDIO NATURAL

La biodiversidad existente en San Miguel está sumamente relacionada con las condiciones climáticas del territorio, de manera que la marcada aridez se convierte en un factor determinante para explicar la fisonomía y la variedad de especies animales y vegetales. En este sentido, al contrario de lo que sucede en la zona norte de la Isla, donde hay un progresivo escalonamiento en pisos vegetales, en este sector se pasa directamente del piso de costa al pinar de las zonas altas, con apenas algunas especies propias de los pisos intermedios, pero siempre de una manera discontinua, sin dar paso a grandes formaciones. Esto lo explica, además de las condiciones climáticas, la presencia de suelos pobres, poco evolucionados y la intervención antrópica a lo largo y ancho de los años.

La vegetación La fauna Patrimonio natural

La vegetación

La franja que se extiende desde el mar hasta los 500 m de altitud aparece ocupada por extensas formaciones de matorral xerófilo. Así, aunque en algunos sectores se pueden identificar especies propias del cinturón halófilo costero como la lechuga de mar, la piña de mar o el salado, esto se reduce a un territorio muy restringido. Así las cosas, en la mayor parte del transecto altitudinal destacan especies como el cardón (Euphorbia canariensis), el cornical (Periploca laevigata), la chumbera (Opuntia), el balo (Plocama pendula), la aulagas (Launaea arborescens) y sobre todo las tabaibas (Euphorbias), tanto amargas como dulces. En este ámbito también encontramos un endemismo canario, el cual es poco frecuente en el resto de la isla, se trata del cardoncillo (Ceropegia fuscae) propia de ambientes aridez.

Aumentando de altitud, ya en los sectores de medianías, los cultivos se intercalan con formaciones de tabaibal-cardonal, en las que también se localizan comunidades de jarales de cierta importancia, así como entornos residuales de especies arbóreas termófilas como los acebuches (Olea europea) y las sabinas (Juniperus canariensis).

Existe, en los entornos más escarpados del relieve, una amplia presencia de especies rupícolas. Por su parte, en las zonas altas, por encima de los 800 metros nos encontramos con interesantes formaciones de pino canario (Pinus canariensis), en ocasiones asociados con jaguarzos, aunque en el caso de San Miguel el porcentaje es reducido.

Algunas especies vegetales que se pueden encontrar en San Miguel de Abona

5.1. Algunas especies vegetales del municipio. (MC, SG y AMAPCIT)

La fauna

No se puede hablar de la existencia de una diversidad faunística importante en el municipio debido al clima existente y al efecto que genera la actividad humana a las especies animales. Si a ello se le suma el hecho de que Tenerife no se caracteriza por ser un territorio de suma relevancia a nivel animal, podemos afirmar que no existe una riqueza sobresaliente desde el punto de vista zoológico. Pese a todo, es destacable la presencia de invertebrados, especialmente de artrópodos, tanto arácnidos como insectos, desde dípteros, hasta coleópteros e himenópteros, recalcando especialmente la presencia del longicornio del cardón (Lepromoris gibba). Este grupo, el que más endemismos tiene de toda Canarias, se encuentra bien representado en todo el perfil altitudinal del municipio ya que presentan adaptaciones a todo tipo de ambientes.

Por lo demás, lo más destacable, además de algunas aves como el andarríos chico (Actitis hypoleucos), la garza real (Ardea cinerea), el cernícalo (Falco tinunculus), la bisbita (Anthus berthelotii) o la pardela (Calonectris diomedea), entre otras, es la existencia de reptiles, en donde el perenquén (Tarentola) y los lagartos (en especial el Gallotia galloti) son las especies más frecuentes.

5.2. La bisbita caminero es una especie endémica de la Macaronesia que suele encontrarse en los ámbitos costeros. Su pequeña cabeza y sobredimensionado pecho son sus principales características físicas. (AMAPCIT)

Por otro lado, no sería de recibo no completar el apartado de la fauna sin citar los fondos marinos del municipio donde se encuentran los sebadales (Cymodocea nodosa), compuesto por especies sensibles a la alteración de su hábitat y que encuentran aquí condiciones positivas para vivir. En dichos ámbitos la diversidad de fauna es extensa con hermosos ejemplares como el gusano de fuego, la tortuga verde, o el rascacio, entre muchos otros.

Zonas de interés desde el punto de vista del patrimonio natural

Pocos son los municipios de Canarias que no tengan valores merecedores de ser protegidos. San Miguel de Abona no es una excepción. Pues a pesar de que no cuenta con una gran cobertura vegetal ni un paisaje caracterizado por la presencia de grandes masas arbóreas si atesora una notable riqueza geomorfológica, merced a la multitud de formas de relieve de distintos materiales y génesis estructural y modeladas por diversos procesos dinámicos. Es debido a ello que el municipio goce de figuras que protegen el patrimonio natural presente, como lo son los monumentos naturales del Roque de Jama y de Montaña Amarilla, perteneciente a la red española de espacios naturales protegidos, además de la reserva privada del Paisaje Lunar de San Blas, de indudable valor y belleza paisajística y con una clara orientación hacia el turismo.

Monumento Natural del Roque de Jama

El Monumento Natural del Roque de Jama, se encuentra entre los municipios de San Miguel y Arona, posee una superficie de 94,1 ha. Además de ser un monumento natural (categoría III de manejo según la UICN) también forma de la Red Natura 2000 como Zona Especial de Conservación (ZEC).

5.3. La imponente figura del Roque de Jama emerge, como un bastión natural, para hacerse notar en el paisaje. (ASMI)

El interés de Jama reside en el hecho de que constituye una estructura geomorfológica de destacado relieve y representatividad, y un elemento de gran belleza y singularidad paisajística. A estos valores hay que añadir los derivados de su interés científico y geológico ya que guardan relación en origen con la formación de los sectores antiguos del macizo de Adeje (y por ende de toda la isla) y además conforma la mayor formación rocosa del Valle de San Lorenzo con una altura de 773 metros. Está constituido por un pitón volcánico de basaltos y traquibasaltos de gran antigüedad que ha sido desmantelado por la erosión, dejando en superficie la formación interior del mismo, propios del Mioceno (Era Terciaria). Además cabe destacar que se trata de uno de los edificios volcánicos más altos de Tenerife y en él existen interesantes endemismos botánicos, destacando especies de hábitats rupícolas, pero también se aprecian la existencia de importantes grabados aborígenes de tipo geométrico.

Monumento Natural Montaña Amarilla

El Monumento Natural Montaña Amarilla tiene un total de 27,8 hectáreas de las cuales 27,37 pertenecen a San Miguel de Abona y 0,18 a Arona. La importancia del cono de montaña Amarilla como un espacio protegido singular se basa en que se trata de un elemento geomorfológico de gran interés a nivel natural y científico. Asimismo, forma parte, como estribación más meridional, de un conjunto paisajístico de volcanes alineados del sur de Tenerife (alineamiento de Guargacho), siendo el más pequeño de todos ellos al medir solo 71 metros de altura.

Pero lo más llamativo a nivel científico es sin duda su origen freatomagmático, que le confiere una coloración distinta, además de otra serie de particularidades derivadas de su génesis eruptiva (por ejemplo un cráter hundido a 30-35 metros de altura) que aumentan su importancia e interés.

5.4. El volcán de Montaña Amarilla es uno de los mejores y más genuinos edificios con génesis freatomagmática de Tenerife. (CIT)

De igual manera, la presencia de una duna fósil en su base y de especies propias del cinturón halófilo costero como el salado (Schizogyne sericea) o la lechuga de mar (Astydamia latifolia), además de una avifauna en donde las especies más destacadas son la calandria (Calandrella rufescens) o la bisbita caminera (Anthus berthelotii).

Reserva ambiental San Blas

Se trata de una reserva privada en donde hay instalado un complejo hotelero que pretende vivir en coherencia con el medio ambiente, llevando a cabo actividades relacionadas con el turismo de naturaleza. No pertenece por tanto a la red española de espacios naturales protegidos.

Comprende un territorio de notable belleza, con un paisaje de pumitas que se corresponde con la etapa más explosiva de Tenerife, cuando se formó el edificio Cañadas y una nube volcánica de casi 400º C que avanzaba a más de 100km/h llegó al Océano Atlántico. El legado son las pumitas, las blandas y amarillentas ignimbritas y los duros y oscuros basaltos. Todas ellas rocas que prevalecen en este lugar y que se han ido modelando mediante la acción de los agentes erosivos, dando lugar a un territorio de múltiples formas, texturas y colores, con una geomorfología hija del viento que le confiere su denominación como "paisaje lunar".

Además de todo ello, en esta reserva también es preciso destacar la presencia de comunidades vegetales de tabaibas, cardonales, tasaigos y balos, pero también la existencia de animales tanto vertebrados como invertebrados, destacando el valor de la avifauna que suele anidar entre las paredes de las formaciones rocosas. Por otro lado, este territorio también fue lugar de residencia para los guanches y posteriormente para los pastores y agricultores (en especial se cultivaron cereales y tomates tanto de subsistencia como de exportación) que se establecieron en este entorno del municipio sureño.

5.5. Colores y formas se combinan para generar un espacio único, similar a la de la superficie lunar, pero cerca de la costa del municipio de San Miguel de Abona. (ASMI)

Problemas y logros en relación con el patrimonio natural

  5/22