Se trata de una estación de grabados guanches, situada muy cerca de la localidad de San José de los Llanos, rodeada de conos volcánicos y vegetación endémica.
El núcleo principal está formado por un conjunto de bloques basálticos que sirven de soporte a las representaciones rupestres y grabados que se distribuyen en distintos paneles. La importancia de esta estación radica, no sólo en el repertorio de grabados sino por encontrarse en una zona arqueológicamente notable de la isla, pues en las proximidades, en la montaña de Tomás Seche, en su cima, hay restos de un taller lítico con abundantes restos de talla de obsidiana y fragmentos cerámicos de adscripción aborigen y etnográfico.
Fuente: BOC (Botetín Oficial de Canarias), Gobierno de Canarias.