Reductos de vegetación termófila
Los reductos actuales de vegetación termófila indican que en el pasado los sabinares, acebuchales, almacigares y un sinfín de plantas asociadas debieron grandes zonas de la localidad. Puede afirmarse la presencia de plantas de porte arbóreo y arborescentes tan indicadoras como, el drago (Dracaena draco) la palmera canaria (Phoenix canariensis), la sabina canaria (Juniperus turbinata ssp. canariensis), el almácigo (Pistacia atlantica), el acebuche (Olea cerasiformis), el peralillo (Maytenus canariensis), el guaidil (Convolvulus floridus) y el hediondo o yerbamora (Bosea yervamora).
Junto a las especies ya citadas nace el jazmín canario (Jasminum odoratissimum), el granadillo canario (Hypericum canariense), la mosquera común (Globularia salicina), el tajinaste chico canario (Echium strictum ssp. strictum), la norsa (Tamus edulis) y el retamón del sur (Teline osyrioides ssp. sericea). Destaca la presencia plantas típicas del monteverde y de los sectores más húmedos de los bosquetes termófilos, como la bicacarera (Canarina canariensis) y la morgallana (Ranunculus cortusifolius).