Situada en El Tanque Bajo representa un magnífico ejemplo de vivienda tradicional vinculada al mundo rural.
Se accede a ella través de un camino empedrado bien conservado que da a un patio frente a la fachada de la vivienda principal. Se constituye de cinco viviendas, con dos patios interiores. Se completa con un cuerpo de cuadras y establos en mal estado de conservación.
El inmueble principal tiene dos plantas, una planta rectangular en la que se individualizan dos módulos mediante sendas cubiertas de teja curva a cuatro aguas. Sus muros son gruesos, de piedra basáltica y mortero a base de tierra, arena y agua. Sobresale un amplio balcón corrido y cerrado con tablazón. En el piso de la planta superior destacan sus ventanas correderas de doble hoja con cornizas de madera, una tipología que cobró cierto auge en este ámbito de la isla.
La planta baja se aprecian cinco huecos dispuestos asimétricamente, con tres puertas y dos ventanas de diferente tipología. La puerta y ventana del lado este son de tablazón y de cristalera con antepecho macizo, mientras que las del lado oeste, más recientes, son de postigos, con asiento de rinconera en la única ventana existente.
La estancia principal ofrece hacia el patio posterior y en planta alta dos ventanas de corredera macizas, con montante acristalado, así como una puerta de acceso a un balcón abierto, hoy desaparecido. Especial atención merece la cocina, dispuesta en un módulo independiente, aunque unido al cuerpo principal. Aun en mal estado, todavía son perceptibles los fogones, el horno, revestido de barro refractario, y varias alacenas.
El conjunto se completa con diversas dependencias en mal estado y cubiertos por la vegetación.
Fuente: BOC (Boletín Oficial de Canarias) Gobierno de Canarias