Se trataba Sombrero de Trabajo destinado únicamente para las mujeres. Su confección (en la actualidad llevada únicamente por la sombrerera de Taganana Amalia Negrín Manrique) consta de 5 pasos fundamentales que se resumen en los siguientes puntos.
Manojos de palmito. Se emplean los brotes más tiernos de la hoja de palmera: el palmito. A continuación se abre cada hoja y se tiende en una azotea o en un lugar expuesto al sol durante 15 días hasta que se blanquea. Posteriormente, con una aguja de coser se pincha después cada palmito y saca varias tiras finas de cada hoja, que se agrupan en manojos.
Un remojo para tejer. Se dedican un par de horas antes de empezar a tejer o trenzar la larga tira de esterilla. Para ello se ponen en agua los manojos.
Esterilla con jeito. Con las tiras húmedas se pone a trenzas esterilla. A cada nuevo trenzado de la esterilla se le da un ligero tirón o geito para que quede bien apretado.
Limpiar la tira de esterilla. Las puntas de fibra que sobresalen se deben cortar con tijeras (acto que se denomina “limpiar”)
Coser y dar forma. Con tiras finas del propio palmito, se cose la esterilla dando forma al sombrero: empieza por el ancho de copa, baja por el alto y sigue por el ala.
Esta labor tradicional formaba de parte, como muchas otras, del modo de vida de los santacruceros durante muchos años hasta que los rumbos de la economía se alejaron del mundo rural y de las actividades del sector primario. Es por ese motivo que hoy en día la mayoría de estas actividades las realizan personas mayores, con edades superiores a los 50 años, por lo que parece necesaria la existencia de un relevo generacional para que la artesanía santacrucera sigue estando vigente.
Fuente: Yuri Millares en la revista digital Pella de Gofio
http://www.pellagofio.com/?q=node/271