Problemas y logros en relación con el patrimonio natural
Desde el momento que el ser humano comenzó a poblar la isla, mucho antes incluso de la llegada de los conquistadores normandos, el medio natural de Fuerteventura y por supuesto, del municipio de La Oliva, se ha visto amenazado por multitud de factores o procesos que han intervenido decisivamente en la situación actual del; tala indiscriminada, pastoreo, consumo excesivo de los recursos hídricos, agricultura de exportación etc. que arrasaron por completo con gran parte de la fauna y vegetación de la zona. En las últimas décadas se sumó el crecimiento urbanístico y turístico, especialmente en el núcleo de Corralejo, cuyo crecimiento ha puesto en peligro paisajes naturales tan únicos como el Parque Natural de las Dunas de Corralejo, causando un impacto tanto en la biodiversidad del aérea como en las propias formaciones dunares que la componen.
Para acabar con ello ciertas iniciativas, no siempre aceptadas, luchan por recuperar ciertas zonas declarándolas áreas protegidas; Espacios Naturales Protegidos, o Zonas de Especial Protacción de Aves son algunas de ellas, que mediante la ley posibilitan la conservación del patrimonio natural. A ella habría que unir la declaración de Fuerteventura como Reserva Natural de la Biosfera, que aboga por la conservación de hábitats y paisajes naturales únicos en todos los municipios de la isla, promoviendo ideales de respeto por el territorio y por los valores tradicionales (artesanía, ganadería) y naturales, resaltando los valores que hace de Fuerteventura y por extensión, de La Oliva un territorio único que merece protegerse.